Ejecutan a colono israelí

Tensión tras hallar el Ejército el cadáver. Ministros y diputados palestinos arrestados en Ramala.


El Ejército israelí encontró esta madrugada el cuerpo de Eliahu Asheri, un colono judío de 18 años que había sido secuestrado el pasado domingo por milicianos palestinos en Cisjordania mientras hacía autostop. El cadáver fue hallado en el marco de una operación de búsqueda llevada a cabo en Ramala. Ayer, los Comités Populares de la Resistencia reivindicaron la muerte del colono, según una radio israelí. Además, en la tarde de ayer, las Brigadas de los Mártires de al Aqsa, vinculadas al partido Al Fatah, se atribuyeron el secuestro de otro colono cerca de Tel Aviv. Se trataría así del tercer israelí secuestrado, después de que la captura del cabo de 19 años Gilad Shalit provocara ayer la entrada del Ejército israelí en los territorios palestinos.Las maniobras militares continuaron esta madrugada con el arresto, cerca de Ramala, de una decena de ministros y diputados palestinos -entre ellos, el titular de Trabajo, Mohamed Barguti-, en una operación que consistió en invadir esta ciudad cisjordana por varias direcciones. Barguti, del Gobierno de Hamas, fue detenido en la aldea de Birzeit, a las afueras de Ramala, poco antes de que vehículos militares israelíes invadieran la ciudad.Un elevado número de tropas rodearon en Jerusalén la casa del ministro de Asuntos de Jerusalén, Jaled Abu Arfa, y le arrestaron. Los soldados entraron también en la casa del ministro de Asuntos de Prisioneros cuando éste no se encontraba allí. El Ejército israelí arrestó también a varios diputados de Hamas en Jerusalén, Jenín y Belén. En Kalkilia, detuvieron al alcalde, Uayih Kuas, y a su segundo.Los tanques y la infantería de las fuerzas armadas israelíes establecieron un punto de observación estratégico en un aeropuerto en desuso a un kilómetro de la ciudad de Rafah, en el sur de la franja. Los civiles palestinos, especialmente de zonas rurales, huían con sus coches, a pie y en tractores, muchos en pijama, hacia la costa del Mediterráneo y la localidad sureña de Jan Yunes, cuyos hospitales, como los de Rafah, se hallan en estado de emergencia. Combatientes palestinos merodeaban con sus armas y explosivos por Rafah y colocaban artefactos junto a las carreteras y calles en previsión del avance de las tropas y los tanques israelíes. También fue atacada la única central eléctrica de la zona, lo que ha dejado a oscuras la ciudad de Gaza y extensas zonas de su costa mediterránea, como parte de la ‘guerra psicológica’ para presionar al Gobierno palestino de Hamas para que consiga la liberación del soldado. Por su parte, el primer ministro israelí mantiene que no negociará ni excarcelará a prisioneros. En la mañana de ayer, aviones del Ejército israelí sobrevolaron el palacio del presidente sirio, Bashar Asad, en Latakia, en una advertencia para que Damasco no apoye a los secuestradores. Según informó un canal de televisión local, baterías de defensa antiaérea siria dispararon contra dos aviones israelíes. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien se entrevistó telefónicamente con los líderes locales, pidió “máxima moderación” para no expandir a otras áreas el conflicto palestino-israelí y dijo que el primer paso para la solución de la crisis es liberar al soldado israelí secuestrado. En eso coincidió EU, aunque el portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow, consideró un acto de defensa propia la operación militar israelí y acusó a Hamas de haber precipitado la situación de enfrentamiento en la Franja de Gaza. Por su parte, el primer ministro palestino, Ismail Haniya, acusó a EU de haber respaldado la invasión israelí dando luz verde a la operación militar de Tel Aviv . Tímido y tranquiloEl soldado israelí secuestrado y llevado a la Franja de Gaza Gilad Shalit, de 19 años, está considerado un joven tranquilo y un poco retraído. Prefiere pasar desapercibido, dicen sus familiares. Shalit tiene una hermana menor y un hermano mayor, su madre, Aviva, trabaja en la oficina de protección medioambiental y su padre, Noam, es de origen francés. El joven de 19 años empezó hace apenas un año su servicio militar -obligatorio- y fue destinado a un tanque. Previamente finalizó sus estudios de secundaria en un kibbuz en Galilea. “Gilad es un muchacho maravilloso, tranquilo, un poquito cerrado y amable con todo el mundo”, aseguró una amiga de la familia al diario Maariv.Su familia vive en una idílica localidad en los Altos del Golán. Desde el domingo, todos allí siguen tensos las noticias y la casa de los Shalit, en Mizpe Hila, es un lugar de peregrinación de políticos y militares. A pesar de todo, el padre siempre aparece ante las cámaras muy contenido y solemne. Tan sólo una vez perdieron los nervios los padres del joven: cuando amigos de Gilad trajeron un álbum de fotos con imágenes de su hijo durante el servicio militar. Tras el comienzo de la ofensiva militar en la Franja de Gaza, la noche del martes, con la que Israel pretende lograr la liberación del joven, el padre de Gilad dijo: “Esperamos que no sufra daños ningún soldado ni ningún civil inocente de los dos bandos, ya sean israelíes o palestinos”.