“Pueden asesinarnos, pero nuestra bandera no caerá”

El primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, asegura que la ofensiva militar israelí, bautizada como “Lluvia de verano”, no conseguirá derribar Hamás.

Marius Schattner, Jerusalén / AFP

AFP / END. Israel mantiene su ofensiva militar en Gaza, causando muerte y caos entre la población palestina.

La ofensiva terrestre israelí contra Gaza estaba frenada este viernes tras una mediación egipcia para liberar al soldado israelí secuestrado, pero Israel mantenía su presión en la región intensificando sus ataques aéreos. Mientras tanto, el primer ministro palestino Ismail Haniyeh, señaló que la ofensiva israelí no provocará la caída de su gobierno.

Las autoridades israelíes asestaron este viernes un nuevo golpe a la dirección política del Movimiento de Resistencia Islámica (cuyo acrónimo en árabe es Hamas), que dirige el gobierno palestino, anulando el estatuto de residentes en Jerusalén este de un ministro y tres diputados palestinos de esta organización.

El ministro para los Asuntos de Jerusalén, Jaled Abu Arafeh, y tres diputados radicados en Jerusalén Este anexada ya no tendrán derecho a vivir allí, según esta decisión sin precedentes tomada por el ministerio del Interior. Estos cuatro responsables fueron detenidos el jueves durante una ola de arrestos en la cual al menos 64 ministros, diputados, alcaldes y otros dirigentes políticos del Hamas fueron encarcelados.

El primer ministro palestino Ismail Haniyeh, miembro del Hamas, señaló este viernes en una prédica que la ofensiva israelí no provocará la caída de su gobierno. Los israelíes "pueden asesinar a dirigentes, arrestar a ministros y diputados, pero nuestra bandera no caerá", proclamó en su primera intervención desde el comienzo de la ofensiva israelí.

En cuanto al soldado israelí secuestrado, Haniyeh dijo que "continuamos nuestros esfuerzos y nuestras comunicaciones con los egipcios, con el presidente (Mahmud Abas) y otras partes para poner fin a este asunto, pero la escalada israelí pone obstáculos". También anunció que no habrá referéndum sobre un documento para resolver la crisis tras la conclusión de un acuerdo entre los movimientos palestinos.


AFP / END. El primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, afirmó hoy que la ofensiva israelí no logrará derribar al gobierno de Hamas.


La operación "Lluvia de verano", lanzada para liberar al cabo Gilad Shalit, adopta cada vez más la forma de una campaña sistemática contra el Hamas tratando de anular los resultados de las elecciones de enero, que llevaron al poder a este movimiento que preconiza la lucha armada contra Israel y que se niega a reconocer a ese país.

"Si el cabo Gilad Shalit es asesinado por sus secuestradores será el fin del gobierno de Hamas", advirtió un alto responsable del ministerio de Defensa israelí que solicitó el anonimato.

"Israel tiene una ocasión única de terminar con Hamas. Es por eso que el objetivo de Israel no es solamente liberar a Gilad Shalit, sino erradicar al gobierno del Hamas", sostuvo el diario Yediot Aharonot. En cambio, el periódico Haaretz acusó al gobierno israelí de "haber perdido la razón" y de haber iniciado "una escalada militar carente de toda lógica".

"Presionar al gobierno palestino no sirve para nada, ya que está claro que ignoraba que se llevaría a cabo un ataque el domingo", afirmó Haaretz, refiriéndose a la operación del domingo durante la cual este cabo fue hecho prisionero y dos militares israelíes y dos atacantes palestinos murieron. Sin embargo, dicho ataque fue reivindicado por el brazo armado del Hamas.

Por otra parte, la decisión del primer ministro israelí Ehud Olmert de suspender el jueves la ofensiva terrestre provocó fuertes disensiones con el estado mayor, se supo de fuente gubernamental. Olmert rechazó el jueves la propuesta de llevar a cabo una operación de gran envergadura en el sector de Beit Hanun, en el norte de la franja de Gaza, destinada fundamentalmente a poner fin a los disparos de cohetes contra Israel.

El jefe del gobierno israelí estimó que la misma causaría un número demasiado elevado de víctimas civiles, mientras la magnitud de la ofensiva israelí comienza a provocar numerosas críticas en la comunidad internacional.

La presidencia del Consejo indicó que la operación en el norte de la franja de Gaza fue congelada luego de un pedido de Egipto de que diera más tiempo a la negociación para liberar a Gilad Shalit. Sin embargo, la oficina del primer ministro reiteró que Israel no negociará ningún intercambio de prisioneros "con los terroristas".